El peso del amor amenaza el puente de las artes
Pasear por las calles de París, visitar la Torre Eiffel, tomar una crepe y acabar en el Puente de las Artes colgando un candado de amor se puso de moda tras la publicación de la novela romántica “Tengo ganas de ti” del italiano Federico Moccia. Desde entonces, miles y miles de enamorados se han jurado amor eterno como los protagonistas de esta historia, atando un candado a barandillas, puentes y monumentos de todo el mundo.
Esta acción llena de simbolismo puede llegar a ser muy peligrosa: hace pocos días se desprendía una parte de la barandilla de más de dos metros del Puente de las Artes de París por el peso de los candados. El mítico puente de madera que une la Academia Francesa con el Museo del Louvre tiene más de dos siglos de antigüedad y, claro, esta práctica que se ha ido extendiendo en los últimos años ha dañado gravemente su estructura. Pero no sólo se ha visto afectada esta ciudad, en Roma se decidió retirar todos los candados del puente Milvio que atraviesa el río Tíber por la misma razón, y en el Ponte Vecchio de Florencia los candados también están causando verdaderos estragos.
¿Será el fin del amor en la ciudad del Sena? No lo creemos, seguro que existen un montón de alternativas para seguir expresando el amor libremente. Por ejemplo, en Montmartre se encuentra “Le mur des je t’aime” (El muro de los te quiero) donde está escrita en más de 300 idiomas y dialectos diferentes esta maravillosa frase. ¿Sois unos románticos empedernidos? ¿Os ha RON-dado alguna vez la cabeza colgar un candado? Queremos saber…